Investigadores neozelandeses pudieron extraer datos de las cajas negras del Boeing 787-9 Dreamliner que realizaba el vuelo LA800 que sufrió un «desperfecto técnico» y que provocó que pasajeros y tripulación sufrieran lesiones.
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Los investigadores indicaron que están recuperando toda evidencia del vuelo «incluyendo la incautación de las grabadoras de voz y datos de vuelo de la cabina», según indica el portal emol.com.
Aun cuando esto se realiza en Nueva Zelanda y con personal de ese país, la investigación sigue perteneciendo a la DGAC de Chile, al ser un avión con matrícula chilena (CC-BGG). Por tanto, Agentes de la Dirección de Aeronáutica viajarán al país oceánico para saber in situ lo que sucedió en pleno vuelo.
“Se me apagaron los instrumentos”
Brian Jokat, un pasajero que se encontraba en el vuelo, fue entrevistado por la cadena internacional CNN, en donde comentó que el piloto se encontraba en estado de shock tras lo sucedido.
“…Le pregunté que había pasado, […] me dijo que los indicadores se fueron a negro, que perdió toda capacidad de volar por unos momentos[…] me dijo ‘se me apagaron los instrumentos’. Lo pudo recuperar y fue así como el avión pudo continuar con el vuelo”, comentó el pasajero, tras intercambiar palabras con el comandante una vez aterrizado en el Aeropuerto de Auckland.