Ingenieros indonesios están siendo investigados por el presunto robo de tecnologías relacionadas con el avión de combate KF-21 “Boramae” durante su fase de desarrollo.
Según el Yonhap News, la Administración del Programa de Adquisiciones de Defensa (DAPA) informó que los ingenieros indonesios enviados a Korea Aerospace Industries (KAI) son sospechosos de almacenar datos sobre el desarrollo del KF-21 en un dispositivo USB.
“Actualmente se está llevando a cabo una investigación conjunta compuesta por agencias relacionadas, incluido el Servicio Nacional de Inteligencia, para investigar las circunstancias del presunto robo de tecnología por parte de los indonesios”, declaró a la prensa un funcionario de la DAPA.
La investigación se centra en esclarecer si los datos almacenados contienen tecnologías estratégicas relacionadas con el programa de desarrollo del KF-21, según fuentes familiarizadas con el asunto. Los indonesios sospechosos tienen actualmente prohibida la salida de Corea del Sur.
Indonesia, país socio del proyecto de desarrollo del caza KF-21, viene desde hace años incumpliendo sus compromisos de asumir el 20 por ciento del coste del proyecto, mientras en paralelo lleva adelante la compra de cazas Rafale franceses y negocia con EE.UU. la posible adquisición de 24 F-15EX.
El último desplante indonesio a Corea del Sur se produjo en noviembre del 2023, al no respetar su compromiso de notificar al gobierno coreano de su plan de pago de la parte que le corresponde del coste del proyecto del KF-21, el cual debía ser presentado en octubre.
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En dicha ocasión, el director de la DAPA, Eom Dong Hwan, declaró que “el hecho de que Yakarta no honre sus pagos socava la confianza en su compromiso de desarrollar un avión de guerra polivalente avanzado para las fuerzas aéreas de las dos naciones”. De encontrarse culpables a los ingenieros sospechados de robo de información confidencial, es probable que Seúl expulse del programa a Indonesia y podría adoptar duras medidas legales y políticas contra Yakarta.
Corea del Sur, que prácticamente tuvo que encarar el desarrollo del KF-21 en soledad, avanza a buen ritmo con la fase de pruebas de los prototipos y planea comenzar la producción en serie de los cazas a finales de este año, con el objetivo de desplegar 120 KF-21 “Boramae” para 2032.
