El Ministro de Transporte de Irlanda, Eamon Ryan, fue etiquetado como «incompetente» e «idiota» por el CEO de Ryanair, Michael O’Leary, en una entrevista radial reciente.
El conflicto surgió por la resistencia del Partido Verde a aumentar el límite de número de pasajeros en el Aeropuerto de Dublín de 32 a 40 millones, una medida que O’Leary argumenta es esencial para la conectividad y el desarrollo económico de Irlanda. La dura crítica de O’Leary se produjo durante una entrevista en la radio RTÉ, donde también instó a Ryan a renunciar debido a la postura de su partido.
En respuesta a los comentarios de O’Leary, Ryan expresó su decepción por la naturaleza personal de la crítica, pero se mantuvo enfocado en los temas más amplios en juego, particularmente las implicaciones ambientales del crecimiento de la aviación. El ministro reconoció la necesidad de abordar la contaminación por ruido y la importancia de un desarrollo regional equilibrado lejos del crecimiento centrado en Dublín.
Ryan también señaló que el sector de la aviación, incluyendo a Ryanair, reconoció la necesidad de cambio, comprometiéndose a emisiones netas cero para 2050 a través de la adopción de biofuel y e-fuel.
Mientras el futuro del Aeropuerto de Dublín pende de un hilo, el debate entre Ryan y O’Leary refleja preguntas más amplias sobre cómo Irlanda puede equilibrar el crecimiento económico con sus compromisos ambientales.
