Jennifer Homendy, presidenta de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (National Transportation Safety Board – NTSB) lideró una sesión informativa sobre el reciente evento de descompresión rápida en un Boeing 737- 9 de Alaska Airlines.
Acompañada por investigadores clave e ingenieros aeroespaciales, Homendy compartió perspectivas iniciales sobre el incidente. El equipo destacó su compromiso con la transparencia y la diseminación de información pública, subrayando los valores fundamentales de la NTSB.
Alcance y procedimiento de la investigación: llevará hasta 18 meses
Clint Crookshanks, ingeniero aeroespacial de la NTSB, proporcionó detalles técnicos sobre la trayectoria de la investigación. La NTSB anticipa un examen exhaustivo que podría extenderse hasta 18 meses. Este plazo es típico para investigaciones tan complejas, asegurando un análisis meticuloso de todos los factores involucrados.
La sesión informativa reveló desafíos importantes en la comunicación de la tripulación durante el incidente. Homendy comentó: «Los asistentes de vuelo expresaron preocupación por los menores no acompañados y tres niños en regazo a bordo. Informaron dificultades para ver la cabina y el pasillo y comunicaron que necesitaban más orientación e información durante el evento«.
Además, se discutieron las particularidades de la mecánica de la puerta de la cabina, diseñada para abrirse durante una descompresión rápida. Sin embargo, se observó que la tripulación de vuelo no estaba al tanto de esta característica.
Investigaciones en curso y medidas de seguridad futuras
Las preguntas de los medios de comunicación sacaron a la luz preocupaciones sobre posibles problemas más amplios con la flota MAX. En respuesta, Homendy declaró: «Actualmente estamos enfocados en este avión específico, pero estamos abiertos a ampliar nuestro alcance si es necesario«. El papel de la NTSB en asegurar mejoras de seguridad a largo plazo fue enfatizado, con Homendy destacando su comunicación continua con la FAA y otras partes interesadas.
Respetando lo establecido por la NTSB, han perdido el norte de sus objetivos, que es actuar con la rapidez del caso y esclarecer las causas del accidente para que no se repita. 18 meses para esclarecer este incidente, en dónde tienen todos los elementos en la mano, es mucho tiempo, sino están seguros deben recomendar la para luxación de la flota total de aeronaves 737 MAX-9 y las de diseño igual, pero esperar 18 meses por un analisis que ya tienen, es jugar con la comunidad. El sistema a bordo lo sus sensores detectaron problemas de presurización que no fueron atendidas correctamente de acuerdo al protocolo de mantenimiento, ante una advertencia de problemas de presurización, que los sensores respectivos detectaron.