Al llegar fin de año nos preguntamos: ¿qué sucede con los vuelos en Navidad y Año Nuevo? La realidad es que la mayoría de los vuelos, sobre todo los internacionales, continúan operando normalmente ya que muchas personas eligen volar en estas fechas, ya sea para disfrutar de sus vacaciones o simplemente vivir la experiencia de unas fiestas en vuelo.
Navidad y Año Nuevo son fechas en las cuales muchas empresas, negocios y servicios cierran sus puertas o reducen su actividad para permitir a los empleados disfrutar con sus seres queridos. En el caso de la aviación, la mayoría de los vuelos a nivel global disminuye.
Es normal que el 24 o 31 de diciembre entremos en alguna de las plataformas de seguimiento de vuelos y veamos que después de las 20 horas locales prácticamente no haya vuelos domésticos sobrevolando tu país. La actividad doméstica es reducida o suspendida al anochecer de los dos días y reanudada en las primeras horas del 25 de diciembre o primero de enero.
Las fiestas a bordo
La mayoría de los vuelos que operan en las vísperas de Navidad y Año Nuevo son internacionales o de largo recorrido. Por lo tanto, podemos ver todos los años noticias que dicen «El vuelo que volvió un año atrás» o «El avión que despegó en 2024 y aterrizó en 2023«, pero es menos común encontrar artículos que nos remitan que pasa en esos vuelos o como se viven las fiestas a bordo de un avión.
Todo va a depender de la cultura de la aerolínea: hay que recordar que no todas las naciones festejan Navidad o Año Nuevo en las mismas fechas, tal es el caso de China. Pero en el mundo muchas tripulaciones celebran la llegada de un nuevo año o la Navidad con los pasajeros que les ha tocado llevar en sus vuelos.
Las aerolíneas suelen generar dinámicas y eventos especiales para los vuelos que transcurren en estas festividades. Los pilotos y tripulantes suelen utilizar atuendos o decoraciones en su uniforme como gorros de Navidad, corbatas coloridas o accesorios con tonos festivos. Además, podría coincidir que Papá Noel o Santa Claus aparezcan en pleno vuelo para saludar a los niños a bordo.
El trabajo de un piloto, tripulante de cabina o personal de tierra de una aerolínea o un aeropuerto, trae consigo este desarraigo para estas festividades. Significa que el personal afectado no estará junto a sus seres queridos al menos una de las dos fiestas.
Aun así, tanto la tripulación como la compañía aérea hacen que la experiencia de volar para Navidad o Año Nuevo sea completamente distinta y que llegada las cero horas donde sea que se encuentre la aeronave se celebre la Navidad o la llegada de un nuevo año como una gran familia.
