Según información de la Agencia de la Unión Europea para la Seguridad de la Aviación (EASA), las autoridades israelíes están actuando de manera satisfactoria en lo que respecta a los posibles riesgos para la aviación civil debido al conflicto que comenzó el 7 de octubre.
Sin embargo, la agencia enfatiza que los operadores deben realizar una evaluación de riesgos rigurosa y tener un plan de contingencia efectivo, además de estar preparados para posibles instrucciones repentinas de las autoridades de Israel.
Los recientes ataques con cohetes y drones desde la región de Gaza hacia Israel y las respuestas de las Fuerzas de Defensa de Israel han resultado en un conflicto armado entre ambas partes. Además, ha habido intercambios de artillería y drones en la frontera con Líbano.
Las autoridades israelíes han emitido advertencias para el espacio aéreo de Tel Aviv a través de NOTAM (Notices to Airmen) para todas las aerolíneas. En ellas, se recomienda que las compañías revisen constantemente la información sobre amenazas y actualizaciones del conflicto en la región.
Según las autoridades, a pesar de que el riesgo está bajo control hasta el momento, es necesario que los operadores tomen medidas de precaución, especialmente en el cálculo del combustible, ya que puede haber retrasos. Los NOTAM también informan que varias rutas en puntos específicos del país están cerradas o con restricciones de altitud y solo algunas estarán disponibles para ciertos tipos de tráfico, como vuelos hacia o desde Jordania.
El aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv, el principal hub de Israel, está funcionando con normalidad, pero con algunos cambios en sus procesos. El aeropuerto Eilat-Ramon es una alternativa fuera de la zona de conflicto para los vuelos. Según la EASA, la publicación y actualización constante de los NOTAM demuestran que la Autoridad de Aviación Civil de Israel está gestionando los riesgos de manera activa.
La agencia también agrega que, hasta el momento, no hay indicios de que las medidas adoptadas por los israelíes sean insuficientes.
La EASA continuará monitoreando de cerca la situación y evaluará cualquier aumento o disminución en los riesgos para las aerolíneas europeas, garantizando que la seguridad de la aviación civil siga siendo una prioridad para las autoridades israelíes.