Según la consultora Frost and Sullivan, se espera que se vendan 50 millones de vehículos eléctricos en el mundo hasta 2030.
La cadena de suministro del sector automotriz es compleja y, para los vehículos eléctricos, es particularmente desafiante debido a las precauciones que las empresas deben tomar en el transporte de baterías eléctricas.
Rodolfo Boraschi, gerente de Auto-Mobility de DHL Global Forwarding, explica que existen reglas que rigen el transporte aéreo y marítimo internacional para garantizar el bienestar de las personas y el medio ambiente.
«Las baterías de iones de litio, que equipan estos coches, se incluyen en la categoría de cargas peligrosas. Su transporte requiere precauciones esenciales, debido a la posibilidad de explosión e incendios cuando se exponen a ciertas condiciones de temperatura durante el transporte, manejo o almacenamiento. Por lo tanto, es necesario que los implicados en la operación tengan conocimiento y experiencia para manejar esta situación«, dice Boraschi en declaraciones reproducidas por nuestro medio asociado, Aeroin.
Teniendo en cuenta la dificultad de este proceso, DFG ha enumerado a continuación algunos cuidados para la logística de los coches eléctricos:
- Almacenamiento de las baterías: es importante observar las reglas de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés) y de la Organización Marítima Internacional (IMO, por sus siglas en inglés). Se deben tener en cuenta el tipo de batería, la cantidad, el peso y la forma en que están dispuestas, es decir, si están solas o dentro de algún equipo.
- Descripción de la carga y embalaje: con el objetivo de minimizar los riesgos, se debe asegurar que la descripción de la carga proporcionada a los transportistas mencione la presencia de baterías de iones de litio, además de proporcionar embalaje de acuerdo con las normas internacionales.
- Conformidad regulatoria: otra cuestión importante es observar las reglas y legislación vigentes en cada lugar donde se encuentre el material.
Es de suma importancia que se cumplan las reglas, ya que existen otras adversidades que pueden poner en riesgo la operación, como situaciones de retraso, pérdida de reservas y posibles multas, que pueden comprometer la competitividad y el rendimiento operativo.
Dado que se trata de cargas peligrosas, es importante siempre trabajar con profesionales y socios cualificados y preparados. También se recomienda mantenerse al día sobre nuevas tecnologías, reglas y mejores prácticas del mercado, para proporcionar orientaciones y apoyos, tanto al importador como al exportador, en los momentos que preceden y siguen al proceso de transporte.
«Lo que diferencia a DHL Global Forwarding en el transporte de baterías de coches eléctricos es la capacidad técnica y operativa en todo el mundo, ya que actúa como principal socio logístico de grandes actores de la industria automotriz. Así, la compañía lidera iniciativas de innovación en los sectores de logística y transporte«, concluye el gerente de Auto-Mobility de DHL Global Forwarding (DGF).