Avianca abrió una convocatoria para diferentes puestos operativos en Colombia y El Salvador mediante la cual planea incorporar a más de 730 nuevos empleados. Su plantilla actual incluye a 12.400 personas, 8.000 de ellas en Colombia.
La aerolínea destacó que valorarán la experiencia previa de los candidatos en esos mercados y que se dará prioridad a quienes provengan de Viva y Ultra Air, las dos low-cost colombianas que suspendieron sus operaciones este año.
Los puestos abarcan a pilotos, tripulantes de cabina de pasajeros, agentes de servicio, despachantes y técnicos de mantenimiento.
«Es momento de pensar en el futuro y en mantener la conectividad del país, por eso buscaremos sumar aviones a nuestra operación e iniciaremos el proceso para encontrar el mejor talento y unirlo al equipo de Avianca», dijo Adrian Neuhauser, CEO de Avianca.
«Este esfuerzo de abrir convocatoria para 730 expertos busca dar opciones y proteger la estabilidad del sector. Cabe resaltar que estas incorporaciones se harán respetando lo establecido en las convenciones colectivas de trabajo existentes», agregó.
Según se desprende del comunicado, la incorporación concreta será dependiendo de las necesidades de expansión de la red de Avianca y también de la «agilidad de las autoridades en las aprobaciones para la incorporación de aviones y personal, sumado a la repartición justa de slots». Las posiciones se irán publicando en los canales oficiales.
Datos obtenidos por Aviacionline a través de Cirium muestran que durante 2023 Avianca tendrá una oferta de 37,5 millones de asientos en su red, lo cual representa un crecimiento del 1,3% frente a todo 2019, previo al estallido de la pandemia, y del 21% comparando con 2022.
«Durante la crisis del sector en Colombia, Avianca ha protegido sin costo a cerca de 186.000 usuarios, y a más de 29.500 con tarifa especial de descuento y hemos operado 71 vuelos incrementales. Lo anterior representa el 90% de los pasajeros afectados protegidos por la industria a la fecha«, concluyeron desde la compañía.
Viva suspendió sus operaciones el 28 de febrero pasado dejando a decenas de miles de pasajeros varados tanto en Colombia como en otros países de la región, luego de que las autoridades colombianas retrasen el proceso de aprobación de su integración a Avianca.
Un mes más tarde, el 29 de marzo, Ultra Air tomó una medida idéntica al no poder sortear las dificultades económicas potenciadas por un contexto desfavorable. La ultra low-cost había cumplido un año de operaciones.
