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A 35 años del Vuelo 110 de TACA: el día en que un piloto con un solo ojo se convirtió en el primer Sully

Pocas historias de la aviación pueden ser tan intensas como la del Vuelo 110 de TACA: un incidente que se desarrolló hace 35 años, el 24 de mayo de 1988, sobre Nueva Orleans. Esta apasionante historia de fallos tecnológicos y tenacidad humana tiene como protagonista al Capitán Carlos Dardano, un piloto que ya había tenido que desafiar al destino más de una vez.

En 1985, durante la Guerra Civil de El Salvador, la carrera de aviación de Dardano sufrió un severo revés. Mientras operaba un avión de carga DC-3, una bala perdida del conflicto terrestre perforó la cabina, costándole su ojo izquierdo. Sin embargo, Dardano se negó a rendirse. Tras obtener la aprobación de la FAA, obtuvo su licencia para operar aviones comerciales a pesar de su discapacidad, ejemplificando su excepcional habilidad y compromiso.

El 24 de mayo de 1988, las condiciones climáticas adversas condujeron a un raro fallo de ambos motores en el Boeing 737-3T0 que Dardano estaba comandando. La antigüedad del avión no fue un factor en este caso: en el momento del incidente, el avión solo tenía 60 ciclos desde que fue entregado de fábrica.

Cuando ambos motores CFM56-3B-1 fallaron mientras atravesaban inadvertidamente una tormenta de nivel cuatro, las 13,400 horas de vuelo de Dardano entraron en juego.

Apoyado por su Primer Oficial Dionisio López, con más de 12,000 horas en su registro, y el Capitán Arturo Soley, un instructor que estaba evaluando el rendimiento del recientemente introducido 737-300, Dardano dirigió con éxito el avión sin potencia hacia un terraplén de tierra cerca de la Instalación de Ensamblaje Michoud. Ninguna de las personas a bordo (tripulación y 45 pasajeros) sufrió heridas de consideración.

Vuelo 110 de TACA en la hierba (Fuente: Informe Final de Accidentes de la FAA)
Vuelo 110 de TACA en el terraplén (Fuente: Informe Final de Accidentes de la FAA) 

TACA Flight 110
TACA 110

La investigación de la FAA concluyó que la ingesta de agua de la tormenta excedió la capacidad de los motores, provocando la falla. Este incidente propició medidas proactivas por parte de Boeing y CFM International para reforzar la seguridad del motor.

A raíz del casi desastre, los ingenieros de ambas corporaciones cooperaron en una secuencia de modificaciones de diseño para los CFM56. Una de esas modificaciones incluía un sistema sofisticado para drenar el agua de los núcleos del motor de manera más eficiente, aumentando así su resistencia a la ingesta excesiva de agua. También se mejoraron las pautas operativas, destacando la implementación del «windmill restart» para restaurar la potencia del motor.

Estos avances se derivaron de un minucioso examen del evento, demostrando cómo la experiencia y los datos empíricos pueden estimular mejoras tecnológicas. Hoy, cada Boeing 737 que despega lleva no solo a sus pasajeros sino también el legado del Vuelo 110 de TACA y el espíritu indomable del Capitán Carlos Dardano.

Pablo Díaz (diazpez)
Pablo Díaz (diazpez)
Director Editorial de Aviacionline. Ante todo, data-driven.

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4 COMENTARIOS

  1. Que sepáis que años antes esto ya pasó en Tenerife. En la costa Norte de la isla. En Islas Canarias. Año 1966 con un DC3 el comandante Maldonado. De la compañía Spantax.
    El si que fue el primer Sully que yo sepa…
    Consiguió amerizar en mar abierto, no en río. Cierto que muy próximo a costa.
    Fue un amerizaje de libro.
    Sólo un fallecido pues a la hora de abandonar la aeronave tuvo tanto miedo que finalmente se hundió con el aparato. No se dejó rescatar.
    La prensa de aquellos días lo o explica con más detalles. La muerte no fue por el amerizaje. Si, por miedo al agua del pasajero.
    Aún hoy pasando con la avioneta en días de mar buena se ven claramente los restos del fuselaje del DC3 de Spantax

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