Airbus inició las pruebas de vuelo de los motores GTF Advantage, la próxima iteración del PW1100G de Pratt & Whitney que equipa a los A320neo.
Esta primera campaña de pruebas de vuelo permitirá probar el motor en una variedad de entornos como ser climas cálidos y fríos, y aeropuertos de gran altitud. A estos ensayos se sumarán las pruebas en tierra que Pratt & Whitney lleva adelante en Mirabel, Canadá. El motor ha completado más de 2.400 horas y 7.800 ciclos de pruebas, incluyendo una prueba exitosa con combustible de aviación 100% sostenible (SAF). La certificación debería continuar hasta la primera mitad de 2023.
De acuerdo a Pratt & Whitney, el modelo Advantage reduce el consumo de combustible y las emisiones de CO2 en hasta un 1% si se lo compara con la versión actual de los motores PW1100G que equipan los Airbus A320neo actuales. Además, mejora la potencia de despegue a nivel del mar en hasta 4% y a grandes alturas en hasta 8%, lo que permite mayor rango y carga útil. Esto lo hace especialmente atractivo para el A321XLR. El nuevo modelo podrá operar a la par de los GTF actuales y además es intercambiable con estos, para garantizar la máxima flexibilidad operativa.
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Rick Deurloo, presidente de motores comerciales de Pratt & Whitney, señaló al respecto que «los actuales GTF ya ofrecen el menor consumo de combustible y las menores emisiones de CO2 para la familia A320neo. El GTF Advantage amplía esa ventaja». Según el fabricante, los motores PW1000G reducen el consumo de combustible y las emisiones de CO2 entre un 16% y un 20%, las emisiones de NOx hasta un 50% y la huella acústica hasta un 75% en comparación con los motores de los Airbus A320ceo.
Continúa Deurloo: «también mejoran la capacidad de la aeronave al aumentar el empuje. Para las aerolíneas, esto significa nuevas oportunidades de ingresos y una mejor economía operativa. Confiamos que nuestra arquitectura de turboventilador es la base más sostenible para los motores de las próximas décadas».
La familia Advantage está certificada para operar utilizando una mezcla de combustible de aviación sostenible y combustible tradicional, aunque Pratt & Whitney continúa trabajando para certificar sus motores para operar con un 100% de SAF.