El gobierno rumano aprobó el jueves un proyecto de ley para comprar 32 aviones de combate F-16 de segunda mano a Noruega, así como apoyo logístico y servicios, por un importe estimado de 454 millones de euros (473 millones de dólares).
Según Reuters, la información habría sido confirmada por el Ministro de Defensa de Rumanía.
Tal como adelantamos a finales del 2021, Rumanía estaba buscando incorporar más aviones de combate F-16, de los excedentes de otros países miembros de la OTAN, para conformar dos escuadrones y poder finalmente reemplazar sus viejos MiG-21 LanceR.
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Actualmente la Fuerza Aérea Rumana (RoAF) cuenta con 17 aviones de combate F-16 A/B comprados de segunda mano a Portugal entre el 2016 y 2021. Estas aeronaves fueron en su momento modernizadas al estándar MLU, configuración M5.2R, que le otorga capacidades similares a los F-16 de los bloques 50/52.
En cambio, los F-16 noruegos son más capaces porque poseen la modernización MLU en la más avanzada configuración M6.5.2, que incluye la facultad de lanzar otras bombas inteligentes más modernas (Laser JDAM) o misiles aire-aire de largo alcance AMRAAM-120D.
Mejor los noruegos
Además de que los F-16 MLU noruegos se encuentran modernizados a una configuración más avanzada, otro punto fundamental que inclinó la balanza a su favor, es que se encuentran en un estado de mantenimiento excelente.
La Directora General de la Agencia Noruega de Material de Defensa, Mette Sørfonden comentaba tiempo atrás que: “Se trata de uno de los aviones de combate mejor mantenidos del mundo y, en general, se encuentran en un excelente estado técnico…”.
Ese fue también un aspecto que influenció la decisión de Draken, la compañía privada de entrenamiento agresor, de adquirir una docena de estos cazas para prestar sus servicios en EE.UU., tras la compra de otros 12 F-16 MLU dados de baja por la Real Fuerza Aérea de los Países Bajos.
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F-16 por 10 años, y luego el salto tecnológico
Según palabras del Ministro de Defensa rumano, los MiG-21 LanceR seguirán volando hasta el 2023, cuando serán finalmente reemplazados por los “nuevos” F-16 MLU, los cuales tienen planeada una vida operativa de 10 años dentro de la Fuerza Aérea Rumana (Forţele Aeriene Române).
Promediando la década de servicios de los F-16, y como parte de un ambicioso plan de rearme general, Rumania planea dar el salto tecnológico a la quinta generación de cazas y comprar el Lockheed Martin F-35 Lightining II.