Rusia y China han acordado una serie de cuestiones clave en el proyecto conjunto del avión comercial de largo alcance CR929, dijo el embajador de China en Rusia Zhang Hanhui en una entrevista con la agencia de noticias estatal rusa TASS.
«La creación del avión de fuselaje ancho y largo alcance CR929 es uno de los proyectos conjuntos más importantes de nuestros países. Las partes ya han llegado a un consenso sobre cuestiones clave como las inversiones, el diseño y la división del trabajo para completar la investigación y el desarrollo (I+D). Los estudios y desarrollos conjuntos avanzan sin problemas y de forma sostenible», señaló el diplomático.
El proyecto de avión de largo alcance chino-ruso de fuselaje ancho está en marcha desde 2014, pero aún no tiene una fecha conocida públicamente de cuándo estaría disponible para entrar en servicio, según reporta nuestro medio asociado, Aeroin.
Con las sanciones occidentales que afectan fuertemente a la aviación rusa tras la invasión de Ucrania, se necesitarán alternativas a largo plazo para que las aerolíneas rusas avancen con operaciones sostenibles.
A mediados de 2020 el programa estuvo a punto de cancelarse debido a diferencias entre ambas partes, y el plazo de entrega del primer avión se pospuso para 2028-2029, cuando previamente la producción en serie había sido estimada para 2025.
En aquel momento se planteaban dudas sobre cómo dividir los mercados y repartir las ganancias del programa.
El CR929-600 tendrá una capacidad de hasta 440 pasajeros en clase única, y entre 258 y 291 en una configuración de dos o tres clases. Su longitud es de 63,75 metros y tendrá una envergadura de 63,86 metros, con un peso máximo al despegue de 245 t. El alcance se estima en 12.000 kilómetros.