El ministro de Transporte de Canadá, Omar Alghabra, y su par de Relaciones Exteriores, Melanie Joly, anunciaron este domingo que el gobierno cerró el espacio aéreo a todos los operadores aéreos rusos, como paso siguiente a las medidas ya tomadas para sancionar a Rusia tras su invasión a Ucrania.
La medida abarca la operación de aeronaves de propiedad rusa, fletadas u operadas por Rusia en el espacio aéreo canadiense, incluido el espacio aéreo sobre las aguas territoriales de Canadá.
«Todo Canadá está unido en su indignación por la agresión del presidente Putin contra Ucrania. En respuesta, hemos cerrado el espacio aéreo canadiense a los aviones de propiedad u operados por Rusia. El Gobierno de Canadá condena las acciones agresivas de Rusia y seguiremos tomando medidas para apoyar a Ucrania», comentó Alghabra.
Por su parte, Joly dijo que «Canadá seguirá haciendo todo lo posible contra la agresión del régimen ruso. Estamos unidos a nuestros aliados en nuestro inquebrantable apoyo a Ucrania y estamos trabajando para poner fin a esta guerra no provocada».
De esta manera Canadá se convirtió en el primer país del continente americano en tomar una medida similar a la que ya han establecido casi una docena de países europeos.