En 3 meses de acción, la Operación Yanomami para combatir la actividad minera ilegal en Tierra Indígena, en el estado de Roraima, en el extremo norte de Brasil y fronterizo con Venezuela y Guyana, incautó 89 aeronaves, inutilizó 22 e inspeccionó 87 pistas junto con 3 puertos clandestinos.
Coordinada por el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, a través de la Secretaría de Operaciones Integradas (Seopi), la acción también retiró a quienes no son indígenas y a los mineros de las tierras de quienes si lo son, además de buscar el restablecimiento de las bases de protección etnoambiental.
Durante este periodo, según reportó nuestro medio asociado en Brasil, Aeroin, se detuvo a 38 personas por estar implicadas en delitos medioambientales. Se incautaron casi 30 mil kilos de mineral, 850 cartuchos y 9 embarcaciones. Además, se inutilizaron 89 mil litros de combustible, se intervinieron 10 balsas, 11 vehículos, 4 tractores y 22 estaciones de servicio.
La operación fue llevada a cabo conjuntamente por la Policía Federal, la división de Carreteras, la Fuerza Nacional de Seguridad Pública, la Fundación Nacional del Indio (Funai), el Instituto Brasileño de Medio Ambiente y Recursos Naturales Renovables (Ibama), el Instituto Chico Mendes para la Conservación de la Biodiversidad (ICMBio), la Agencia Nacional de Aviación Civil (ANAC Brasil), la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (ANATEL), la Agencia Nacional del Petróleo (ANP) y el Ministerio de Defensa (MD).