El viceprimer ministro, Yuri Borisov, comentó ante periodistas que el Ministerio de Defensa puede considerar la compra de cazas monomotores S-75 Checkmate, como parte del futuro programa estatal de armamento.
Según informa TASS, durante la participación del viceprimer ministro Borisov en el Foro de Petróleo y Gas de Tyumen, comentó ante los periodistas allí reunidos que “en los planes futuros del Ministerio de Defensa y de las Fuerzas Aeroespaciales se considerará la posibilidad de adquirirlo el caza”.
Según Borisov, las Fuerzas Aeroespaciales rusas históricamente han sido «cautelosas» con los cazas monomotores, prefiriendo «aviones bimotores por confiabilidad». Sin embargo, los cazas monomotor están bastante extendidos en la aviación militar mundial hoy día, y sus plantas propulsoras ganaron mucho en materia de seguridad.
«Por lo que recuerdo, el comienzo de las pruebas de vuelo será en el 2023, la organización de la producción en masa, si hay demanda, creo que en el 2025/2026; es un marco de tiempo muy realista», piensa Borisov. «De lo contrario, simplemente no entraremos en ese mercado, dominado por modelos americanos y chinos [monomotores]. Según sus características proyectadas, esta aeronave tiene muy buen potencial, tiene todas las perspectivas de ocupar un determinado nicho y ya tiene compradores potenciales. Dos criterios: rapidez de comercialización y un precio razonable son las características que le permitirán ocupar ese nicho», agregó.
Otro aspecto importante que marcó Borisov, es que el potencial de exportación se incrementa notablemente, cuando los clientes extranjeros ven que las fuerzas armadas nacionales aceptan e incorporar los equipos que ofrecen para el mercado externo.
Ejemplos claros de lo acertado de dicho razonamiento se pueden encontrar en dos excelentes productos de la norteamericana Northrop (ahora Northrop-Grumman), que no logró colocar en el mercado de exportación al excelente F-20 Tigershark ni al F-18L (versión simplificada y aligerada del F-18 Hornet embarcado), prefiriendo los clientes al Lockheed F-16 y al McDonnell Douglas F/A-18, por motivos de economía de escala, interoperabilidad con las fuerzas de EEUU y un tren logístico mucho más extendido.
El S-75 Checkmate compartirá muchos elementos con el Su-57 (incluido el motor), principal caza de 5ta generación de las Fuerzas Aeroespaciales rusas, con lo cual podría convertirse su socio perfecto, dentro de una estructura high-low, como en su momento lo fueron el equipo Su-27/MiG-29 o el F-15/F-16.