Mes a mes las aerolíneas que conforman Copa Holdings (Copa Airlines y Wingo) avanzan en la recuperación del tráfico de pasajeros tras el paso de la primera ola de COVID-19 en la región y de cara a una temporada en el hemisferio sur que, aunque estará lejos de las mejores, implicará un respiro frente a lo que ha sido el 2020.
Durante noviembre Copa Holdings tuvo una caída del 72,3% en la oferta (medida en asientos-millia disponibles) frente al mismo mes de 2019, mientras que el tráfico de pasajeros (medido en RPM, pasajeros-milla volados) cayó 74,6%, dando como resultado un factor de ocupación del 78,3%, cifra 7,3 puntos porcentuales menor a la de noviembre del año pasado, y nada despreciable considerando el contexto.
En todos los casos hubo una mejora significativa frente los números registrados en octubre, cuando se registraron caídas en torno al 86% y un factor de ocupación del 69,9%.
La flexibilización de las restricciones al movimiento internacional de personas en varios países de la región, pero incluyendo también a Panamá, ha permitido encausar a la aerolínea en el camino de la recuperación, aún cuando queda un largo camino por delante.
Copa Airlines ya está volando a más de 40 de las 80 ciudades en las que operaba previo al estallido de la pandemia. La compañía espera en diciembre llegar al 40% de su capacidad.