Mitsubishi Aircraft decidió hacer cambios drásticos en su directorio en un momento en el que la compañía japonesa emprende recortes de empleos en un cambio de estrategia: de expansión global y conquista de nuevos clientes a replegarse en el mercado japonés.
La compañía decidió reemplazar al director de desarrollo Alex Bellamy con Yasuhiko Kawaguchi, quien asume el rol de ingeniero jefe. Kawaguchi lideró los esfuerzos de Mitsubishi en la certificación de aeronaves. Se descuenta que Bellamy dejará la compañía.
No sorprende a esta altura que el cambio de estrategia implique la pérdida de más de la mitad de los 2.500 empleos en la compañía aeroespacial, que tiene 1.800 empleados en Japón y unos 700 en Norteamérica.
El anuncio es consecuencia de la decisión de la compañía el mes pasado de retirarse de sus operaciones en el extranjero, que incluían un centro de desarrollo en Montreal, Canadá, así como la sede de EE. UU. en Renton y un centro de pruebas de vuelo en Moses Lake, ambos en el estado de Washington.
Bellamy, ex gerente del fabricante canadiense de aviones Bombardier, ha estado con Mitsubishi Aircraft durante los últimos cuatro años, supervisando el desarrollo de su programa regional de aviones y luego su expansión global. Bajo su mando, la compañía comenzó a operar en Nagoya, Renton y Montreal, cambió el nombre del Mitsubishi Regional Jet a SpaceJet y buscó el desarrollo de un SpaceJet M100 de 76 plazas para el mercado estadounidense.
Con la partida de Bellamy, la compañía cambiará su enfoque para completar la certificación del M90, después de 12 años de desarrollo. La compañía ya tiene un avión -el sexto de preproducción- que incluye las mejoras requeridas. Las actividades de ventas en el extranjero se suspenderán hasta que se complete la certificación, dijeron desde la empresa.
Mitsubishi Aircraft había emprendido dos programas, M90 y M100, al mismo tiempo, pero cuando la demanda de transporte aéreo colapsó con el brote del coronavirus, la compañía se enfrentó a dos opciones: continuar con el incierto pero potencialmente lucrativo M100 programa o enfocarse solo en el M90.
La compañía eligió esta última opción. El potencial comercial en los EE. UU. parece muy incierto y el lanzamiento de un nuevo programa habría implicado una inversión adicional en los EE. UU. para el desarrollo, la certificación y la producción del M100. Después de haber invertido miles de millones de dólares, no sería fácil para Mitsubishi Aircraft abandonar el M90 tan cerca de la certificación.