Debido a la caída de la demanda por la propagación del coronavirus y a la restricción a la entrada de pasajeros extranjeros a la Argentina, Azul Linhas Aéreas decidió suspender sus vuelos entre Campinas y Bariloche entre el 21 de marzo y el 30 de junio.
La aerolínea operaba un vuelo semanal entre ambas ciudades para atender al flujo de turistas brasileños que visitaban Bariloche durante todo el año. Durante la temporada alta de invierno reforzaba el servicio con más vuelos.
Además de Bariloche, Azul anunció el levantamiento de los vuelos en una decena de ciudades del interior brasileño, lo que representa casi el 10% de su red en el vecino país (la aerolínea tiene una importante capilaridad regional).
La compañía ya había informado la semana pasada que se producirían ajustes en su red internacional, suspendiendo entre abril y junio sus vuelos entre Fort Lauderdale y Recife, Belem y Belo Horizonte, y entre Orlando y Belo Horizonte y Recife.
Azul también suspenderá entre abril y junio sus vuelos que unen a Buenos Aires con Recife y Belo Horizonte.
