En el contexto de un mercado internacional que se derrumbó durante 2019 (el año cerró con una caída del 27%), el aeropuerto de Rosario salió a reforzar las relaciones con las tres aerolíneas nacionales que operan vuelos regulares desde allí para avanzar en una agenda de trabajo en común que permita potenciar o al menos mantener la conectividad que ha ganado durante el último lustro.
La semana pasada, el flamante director del Aeropuerto Internacional Rosario, el licenciado Eduardo Romagnoli, acompañado por el Secretario de Turismo de la Provincia de Santa Fe, Alejandro Grandinetti, viajó a Buenos Aires para reunirse con el Gerente General de JetSMART en Argentina, Gonzalo Perez Corral; Javier Faroni, miembro del directorio de Aerolíneas Argentinas; y Esteban Tossutti, Director de Relaciones Gubernamentales de Flybondi.
También mantuvieron un encuentro con la coordinadora de Relaciones Interinstitucionales de Turismo de la Nación, Florencia Casamiquela, para «trabajar en el desarrollo del turismo receptivo en la provincia de Santa Fe, dentro de un contexto de grandes oportunidades para Argentina».
En 2019 el aeropuerto de Rosario movilizó 758.224 pasajeros, lo que representa una caída del 12,4% frente al año anterior.
Con apenas 375.369 pasajeros, 27% menos que en 2018, el segmento internacional fue el responsable de la caída general.
En línea con la tendencia a nivel nacional, el cabotaje creció 9%, con 382.855 pasajeros, superando por primera vez al internacional desde 2013.
Al momento de asumir en su cargo hace dos semanas, Romagnoli había expresado que «hoy se presentan nuevos desafíos; hay poco tiempo para todo lo que uno sueña, piensa y quiere, pero hay proyectos de mucha gente que ha trabajado para que este aeropuerto sea lo que es, y entendemos que hay que acompañar».
«Hoy queremos mantener la actividad económica que supone la interconexión a través de Rosario en un contexto económico que nos limita: cerramos el año 2019 con una caída de 100 mil pasajeros en comparativa con el 2018. La prioridad será, entonces, mantener la cantidad de aerolíneas y vuelos para hacerlos crecer y empujar la idea de que a partir de Rosario podemos conectar horizontal y verticalmente con otras provincias y con toda la región centro».
Durante 2018 Rosario perdió vuelos non-stop hacia Santiago de Chile, San Pablo y Porto Alegre, mientras que esta semana Azul informó que dejará de volar desde Recife. A esto se le sumará, desde mayo, la reducción de frecuencias por parte de LATAM en su ruta a Lima.
Con el objetivo de estimular el alicaído tráfico internacional, la administración del Aeropuerto Internacional de Rosario había implementado desde el 1 de agosto pasado una reducción del 38,7% en la Tasa de Uso de Aeroestación (TUA), lo que significó bajarla de USD 49 a USD 30 en todos aquellos vuelos regionales a una distancia de entre 300 y 1.000 kilómetros aire).
«bajarla de USD 49 a USD 30 en todos aquellos vuelos regionales a una distancia de entre 300 y 1.000 kilómetros aire»
Irrisoria medida, como si con esos 19 dólares de diferencia compensáramos la devaluación que cuadruplicó el valor de los pasajes internacionales en poco más de un año y medio.
Esto es oferta y demanda… yo pagué el vuelo a Recife de Azul $8000 en mayo de 2018. Hoy cuesta mínimo $40.000. Olvidate… Recièn vi pasar sobre mi patio uno de los últimos vuelos de esta ruta. Acordate… COPA deja de volar a Panamá este año…