Ayer, la gente de prensa de Aerolíneas envió un comunicado en el que ponen cifras concretas a una tendencia que veníamos viendo: los pasajes van bajando y es cada vez más accesible volar en Argentina. Transcribo el comunicado y llegamos a algunas conclusiones abajo.
Aerolíneas Argentinas bajó un 20% el precio de sus tarifas más económicas en el lapso de los dos últimos años. Eso genera la posibilidad de volar para más segmentos de la sociedad. En forma simultánea, a través de una mayor segmentación de mercado, la empresa logró incrementar sus ingresos.
El 21% de los pasajes que vende Aerolíneas es en el segmento de las tarifas promocionales. Esas tarifas bajaron entre marzo de 2016 e igual mes de 2017 un 17%. Y un 3% adicional entre marzo 2017 y marzo de 2018.
Las tarifas promocionales son las que incluyen descuentos específicos o rebajas en el marco de promociones. La baja aplicada a esos pasajes permite a mayor cantidad de argentinos acceder a viajes aéreos.
“La baja en el precio de las tarifas más económicas es parte de un trabajo exhaustivo de nuestros equipos comerciales para ofrecer tarifas más competitivas en un mercado cada vez más exigente y con una oferta y demanda creciente. Acompañamos este crecimiento con más vuelos, nuevas rutas e intertramos que se operan de forma eficiente y esto nos permite ir hacia la baja en los valores de los pasajes aéreos”, explicó Mario Dell’Acqua, presidente de la compañía, en conferencia de prensa durante el World Trade & Travel Council, foro que engloba a los principales actores del mundo del turismo y negocios.
Por otra parte, la tarifa considerada piso bajó un 57% entre enero de 2015 y marzo de 2018%. En este caso puntual, se trata de la referencia fijada como tarifa mínima por las autoridades regulatorias. En caso de campañas puntuales o accediendo a la compra con una antelación a la media, los pasajeros también pueden acceder a esas tarifas.
Por su parte, la tarifa promedio de Aerolíneas Argentinas tuvo una baja significativamente menor, del 8%, en el mismo período. Es por el impacto de la política de revenue management, que permite segmentar el mercado en múltiples escalones tarifarios, de acuerdo a la anticipación de la compra, entre otras variables. Así, los usuarios que compran sus tickets a última hora, o en los días más demandados, permiten mantener los ingresos de la empresa mientras bajan las tarifas más bajas.
Cabe destacar que durante 2017, Aerolíneas Argentinas transportó más 13 millones de pasajeros, lo que representa un 13% más que en 2016. Al mismo tiempo, durante el primer trimestre de 2018, Aerolíneas Argentinas transporto un 6% ciento más de pasajeros que en el mismo periodo del año anterior.
Mientras tanto, los porcentajes de ocupación superaron el 80% durante 2017 y en lo que va del año promedian un 86%.
Ya hablaremos de revenue management con un invitado especial; pero lo importante para el pasajero es que en un escenario de crecimiento exponencial del mercado aerocomercial Argentino, Aerolíneas puede acomodar sus números, liderar con un buen margen la oferta doméstica y al mismo tiempo bajar sus costos y precios para mantenerse competitiva. Es un equilibrio dificilísimo de lograr, y es destacable que se esté logrando.
Iniciativas como la Noche Aerolíenas, Banda Negativa y demás estrategias de marketing puntuales hacen que sea no sólo más económico emitir un pasaje por AR; la posicionan como una alternativa más en destinos que generalmente son explotados por otros carriers.
Contra un montón de pronósticos que vaticinaban el peor de los infiernos, lo único que se achica en Aerolíneas es el precio de los pasajes. Bravo.