Entre el 13 y el 15 de febrero tuvo lugar en Quito el foro Routes Americas, que reunió a directivos de líneas aéreas y aeropuertos de todo el mundo.
En ese contexto, Ignacio Vallejos, presidente del directorio de TAME, la aerolínea estatal ecuatoriana, dijo que están considerando volver a operar hacia Buenos Aires, una ruta que «tenía buen desempeño para TAME, pero que por mala estrategia comercial dejó de rendir frutos para la aerolínea» (citando a lo que Nicolás Larenas reprodujo en una interesante entrevista que realizó a Vallejos y recomiendo visitar).
Embarcada en un importante plan de expansión, la aerolínea había llegado a Buenos Aires en junio de 2013 operando vuelos diarios desde Quito en aeronaves Airbus A319, pero hacia fines de 2015 e inicios de 2016 empezó a sufrir de una delicada situación económica que la llevó a reducir su flota y su red.
En el Recuerdo: [Fotogalería] Primer vuelo de TAME entre Quito y Buenos Aires
Actualmente, bajo el lema «Tame Despega», la compañía quiere volver a la senda del crecimiento a pesar del lastre generado por deuda que roza los 176 millones de dólares.
Su flota está compuesta por tres Embraer E190, tres ATR 42, tres A319, tres A320 y un A330-200 que promedian 13 años en conjunto, aunque el plan es modernizarla y unificarla en aeronaves Airbus y ATR, por lo que se desharán de los E190.
También consideran implementar un modelo «semi low cost», cobrando aparte beneficios como catering o equipaje extra.
Si se llegar a materializar la ruta será una excelente noticia para el mercado entre Ecuador y Argentina, hoy servido sólo a través de LATAM via Lima, convirtiendo a Quito en la única capital sudamericana hacia la cual no hay vuelos non-stop desde Buenos Aires (con excepción de las Guyanas y Surinam).
Otra capital con la que no tenemos vuelos not-stop es La Paz en Bolivia