El «Aeropuerto Regional Néstor Kirchner» (IATA: VMA / OACI: SAOV) que sirve a la localidad de Villa María fue inaugurado en 2011 tras una inversión cercana a los 30 millones de pesos (USD 7 millones al cambio de entonces).
Las «malas lenguas» dijeron desde la hora cero que su construcción no era nada más que un «capricho político» dada la afinidad partidaria que tenía el intendente de la ciudad con el entonces gobierno nacional.
Villa María está unida por autopista con los tres principales centros urbanos del país: a 180 kilómetros de Córdoba, a 278 kilómetros de Rosario y a 570 kilómetros de Buenos Aires. Esto hacía necesario que cualquier servicio aéreo que se prestara debía mostrarse muy competitivo frente al transporte terrestre, sea en frecuencias, publicidad y promoción y precio, ya que el factor velocidad, si consideramos los tiempos pre y post aéreo, no le daba mayor ventaja.
Como ninguna de esas cuestiones fueron muy bien explotadas, el aeropuerto sólo pudo sostener sus servicios aéreos comerciales gracias a un subsidio que otorgaba la Municipalidad de Villa María a la empresa Macair Jet (de acuerdo a una nota publicada hoy por el diario La Voz del Interior que muy amablemente me acercó Pablo Amadei, el mismo rondaba el millón de pesos por mes). Al interrumpirse el subsidio ante la necesidad de redirigir los fondos públicos hacia otros asuntos, los vuelos dejaron de operarse a mediados de abril de este año.
Nada muy diferente a lo que ya ha pasado tantas otras veces en ciudades del tamaño de Villa María como Goya, Roque Sáenz Peña, Tandil, Merlo, Concordia y un largo etcétera. La aviación regional no es sencilla ni barata, y si se la promueve de mala gana solamente por compromisos políticos, siempre termina así.
Hoy por hoy, según comentó Héctor Muñoz (quien tiene a su cargo el aeropuerto para la Municipalidad de Villa María) en esa nota de La Voz del Interior, la intención es que Avianca Argentina (sucesora de Macair) retome los vuelos pero sin recibir subsidios. “Empezamos a negociar con Avianca con la pretensión de reanudar los vuelos, pero sin subsidiarlos como antes. Podíamos seguir algunos meses, apuntando a mejorar frecuencias y con venta de pasajes en todas las plataformas. Pero en medio de reuniones y llamados, cambiaron las reglas de juego de los vuelos de cabotaje”.
También mencionan que hubo intenciones de asociarse con el municipio de Marcos Juárez para compartir los gastos, pero las negociaciones no avanzaron.
Publicidad local de los vuelos entre Buenos Aires y Villa María