Qatar Airways confirmó hoy lo que se venía rumoreando desde hace varios días, firmando con Boeing un pedido por 30 787-9 Dreamliners y 10 777-300ER, valuados en US$ 11,7 mil millones a precio de lista.
La compañía también firmó una carta de intención por hasta 60 737 MAX 8, valuados en US$ 6,9 mil millones.
La flota actual de Qatar Airways se reparte casi en partes iguales entre aeronaves Airbus y Boeing, teniendo de ésta última un total de 54 Boeing 777 y 30 Boeing 787, todos entregados durante los últimos 9 años, y con este nuevo pedido la compañía lleva su número de aeronaves pedidas a Boeing pendientes de entrega de 65 a 105, de los cuales 60 son 777X.
«Qatar Airways, una de las aerolíneas de mayor crecimiento en la historia de la aviación, anuncia hoy un significativo e histórico pedido que motorizará nuestro crecimiento futuro en los años y décadas que siguen», dijo Akbar Al Baker, CEO de Qatar Airways, y agregó, «Boeing ha probado ser un socio valioso, y este anuncio es testamento de nuestro aprecio a la calidad de sus productos y a su dedicación en proveer una atención al cliente de calidad internacional».
Por su parte, el presidente de Boeing Commercial Airplanes, Ray Conner, dijo, «estamos muy orgullosos de que un líder del mercado como Qatar Airways no sólo continúa apoyando nuestros productos actuales sino que también tiene confianza en la nueva tecnología que será evidente en los 777X y 737 MAX».
Desde que Qatar Airways volvió a ser cliente de Boeing en 2006 la compañía ha sido protagonista de varios hitos, como ser la primera operadora del 787 en el medio oriente y el cliente de lanzamiento del 777X. Si se materializan los pedidos de los 737 MAX 8, será el primer modelo de pasillo único que se incorpore a la flota de Qatar Airways en más de 15 años, en lo que representa un golpe para Airbus, ya que hasta el momento la compañía venía concentrando ese segmento de aeronaves en la familia A320, de la cual mantiene un pedido de 50 aeronaves de la versión «neo», a pesar de haber cancelado algunas aeronaves y haber renunciado a ser el cliente de lanzamiento.